Elegante y deliciosa, esta panna cotta de naranja es el equilibrio perfecto entre la suavidad cremosa y el toque cítrico refrescante.
Ingredientes:
- 500 ml de nata para montar (35% de materia grasa)
- 150 ml de jugo de naranja natural
- 80 g de azúcar granulada (aproximadamente ⅓ taza)
- 4 hojas de gelatina (o 7 g de gelatina en polvo)
- Ralladura de 1 naranja (opcional para decorar)
Instrucciones Paso a Paso:
- Remoja la gelatina:
Coloca las hojas de gelatina en un bol con agua fría durante 5-7 minutos para que se hidraten. Si usas gelatina en polvo, disuélvela en 3-4 cucharadas de agua fría y deja reposar durante el mismo tiempo. - Prepara la mezcla de nata y naranja:
- En un cazo mediano, vierte la nata y el azúcar. Calienta a fuego medio, removiendo constantemente, hasta que el azúcar se disuelva por completo. No dejes que hierva.
- Añade el jugo de naranja y mezcla bien. Retira del fuego.
- Añade la gelatina:
- Escurre las hojas de gelatina y añádelas a la mezcla caliente de nata y naranja. Remueve hasta que se disuelvan completamente. Si usas gelatina en polvo, asegúrate de que se haya disuelto por completo.
- Vierte la mezcla en moldes:
- Reparte la mezcla de panna cotta en moldes individuales o vasos. Deja enfriar a temperatura ambiente durante 15-20 minutos y luego refrigera durante al menos 4 horas, o hasta que cuaje completamente.
- Decora y sirve:
- Desmolda la panna cotta sumergiendo brevemente los moldes en agua caliente y luego inviértelos sobre un plato.
- Decora con ralladura de naranja o rodajas finas de naranja antes de servir.